La presente entrada está dedicada
a una reflexión sobre la pregunta ¿Qué es la ciencia?
Tras la lectura de las entradas
propuestas, y provocar un apartado concreto una buena sonrisa, para empezar, hay
que confesarlo: Yo también soy uno de esos que dice “soy investigador”, pero no
“soy científico”. ¿Será quizás porque como investigar se asocia a ‘persona que
investiga’ y científico a ‘la persona que hace ciencia’, y no se tiene un
concepto claro, sencillo, definible de forma simple… de CIENCIA…? ¿O será
quizás porque el estereotipo de científico es aquella persona dedicada
profesionalmente a la investigación, con experiencia dilatada, publicaciones de
diversa índole, multitud de conferencias, inventos o patentes…y claro, como yo llevo "cuatro días"...?
En mi opinión, sí que es verdad que la sociedad haya encorsetado a la
ciencia a determinados áreas. Puede que se ha extendido en exceso esa figura del que vive en un
laboratorio, hace experimentos, aplica el denominado método científico y
termina haciendo una divulgación en un documento que posteriormente tiene su
repercusión en los medios de comunicación en el mejor de los casos. Ay… creo que la caricaturización de
ciertas profesiones por parte los dibujos animados que vemos cuando somos
pequeños nos han hecho mucho daño…
Yo siempre he visto el método
científico como una herramienta, al igual que es el lenguaje o como son las
matemáticas en las áreas de Física, Química, Ingeniería… En otras palabras, un
protocolo de actuación para la obtención de un fin. Puede resultar
contradictorio pues, cómo efectivamente se puede estar haciendo ciencia en el
ejemplo del aprendizaje a usar un teléfono móvil, como comenta el Sr. Tomé, y
sin embargo no lo consideramos ciencia. (¡Cachis! He estado haciendo ciencia
cuando trabajaba en la empresa privada como ingeniero y hasta en mi tiempo
libre como diversión y ni lo sabía, ni lo he tenido en cuenta, ni siquiera yo
mismo me lo he valorado…)
Habiendo leído los textos y
reflexionando sobre ellos, especialmente el último, que habla sobre la
comunicación de la ciencia que termina plasmándose en “documentos científicos”,
me da la sensación de estar hablando de otro tema similar como es de la
educación. Existe un sistema educativo reglado, desde primaria hasta la
universidad. Totalmente regulado, establecido, encorsetado… la ciencia tiene
sus “documentos científicos”, principalmente esas revistas catalogadas Qx, aunque
también incluiría los libros técnicos o especializados, que han sido desarrollados
e implementados de forma metódica. Por otra parte, está la formación
no reglada. Esa, que puede tener un carácter oficial (Ej.: Licencia de
conducir, permiso de armas, carnet de fitosanitarios, etc…) o no (Otros cursos
de formación en general). En este sentido, si hablásemos de ciencia, serían
aquellas publicaciones en revistas especializadas de menor nivel, libros
generales, ponencias de congresos, etc. Y finalmente, la formación
informal, esa formación a través de las experiencias cotidianas. El citado ejemplo
del Sr. Tomé aglutina un 2x1: Formación informal y ciencia al mismo tiempo.
En definitiva, la ciencia será a
partir de este momento para mí, la generación de aquellos conocimientos
obtenidos mediante la observación, que pueden ser fundamentados o razonados y
repetibles por cualquiera (como era hasta ahora) estén o no ‘documentados científicamente’.
¡Ah! Y yo también soy científico.
Excelente reflexión, y bien integrado lo esencial de las lecturas. Me ha encantado lerrte, científico ;-)
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